El III EBA URBE, Festival de Arte y Espacio Público, luego de un paréntesis de siete años, retoma su labor con la difícil misión de pensar futuros posibles para la construcción de mundos radicalmente desconectados de los registros de la colonialidad. En este proceso, la ruptura emerge como un dispositivo metodológico, no el único, pero sí de extrema importancia para poner en práctica imaginaciones radicales capaces y dispuestas a cumplir con este llamado.
Apostando por el poder de la ficción, más que una distancia estratégica, se busca el surgimiento del mundo como tal, ese mundo en el que vivimos en el que las vidas no hegemónicas, ya históricamente vulneradas, siguen siendo víctimas de la maquinaria de la muerte, del deseo de destrucción y consumo. En esta lógica pueden resonar las ideas de Ailton Krenak: Mi provocación de posponer el fin del mundo es justamente para poder contar siempre una historia más. Si podemos hacer eso, estamos posponiendo el final.
Romper supone una ruptura en el tiempo y el espacio: romper con una historia de secuencialidad y continuidad de la violencia que configura y marca la experiencia moderna/colonial de los pueblos arrojados al abismo. En este sentido, más que reducir ciertas experiencias a un juego binario de violencia/resistencia, es importante generar modelos de fuga del mundo, priorizando las fábulas que visualizan formas de vida más allá de este dualismo.
EBA URBE es un festival enfocado a la producción de jóvenes artistas, la mayoría de ellos englobando libremente proyectos a desarrollar en diferentes medios, lenguajes y técnicas, con el objetivo de ocupar el espacio del edificio Jorge Machado Moreira (conocido como Rectoría) edificio y su entorno.
Por ello, se invita a los artistas a enviar propuestas para la realización de trabajos para la III EBA URBE: Festival de Arte y Espacio Público hasta el 20 de marzo de 2022.
Con sede en la ciudad de Río de Janeiro, EBA URBE comprende a cabalidad las dinámicas nocivas que consolidaron a esta metrópoli como un espacio fracturado, donde las políticas de exterminio practicadas aquí hicieron de esta ciudad una especie de laboratorio de experiencias necropolíticas, lo que hace imprescindible el encuentro y el intercambio. de ideas, de imaginarios que reconfiguran los rumbos de las metrópolis del mundo y proponen otros devenires.